Florida: ¿Romney o Gingrich?
31 Ene
Mitt Romney ganará hoy las primarias de La Florida, y lo hará de manera convincente. Según Real Clear Politics, Romney tiene una ventaja de 10 a 12 puntos sobre Gingrich. ¿Qué ha hecho Romney para lograr este repunte, luego de su derrota en Carolina del Sur? Hizo un cambio de estrategia.
Lo primero que hizo Romney fue buscar un ‘coach’ para los debates. Tal como relata The Washington Post, al día siguiente del triunfo de Gingrich en Carolina del Sur, la campaña de Romney contrató a Brett O’Donnell, experto en entrenar a candidatos presidenciales para debates, y quien fue una figura central del equipo de John McCain en 2008. Y el cambio fue notorio. Los dos debates que se escenificaron en el estado de la Florida, Romney fue más agresivo y más directo en contra de Gingrich. Por ello, a pesar de la fuerte campaña negativa hecha en su contra, Romney no ha sufrido mayores daños en la Florida.
En segundo lugar, Romney cambió su discurso. En vez de concentrar sus ataques en Obama, enfiló sus cartones hacia Gingrich, y luego de los debates, el tono de Romney fue el siguiente:
¡Dios mío! Sé que el Speaker no está contento. El Speaker Gingrich no está muy entusiasmado estos días… Lo sé, es triste. Ha estado haciendo aspavientos para perseguirme por una cosa o por otra, ya lo habéis visto y habéis negado con la cabeza. Ha sido terriblemente revelador el verlo. Creo que la razón por la que no le va bien es por esos dos últimos debates, ¿no creéis?
Luego, Romney ha dicho, ante las afirmaciones de Gingrich, de que no importa lo que suceda hoy en la Florida, seguirá en la contienda:
Ese es habitualmente un indicio de que crees que vas a perder. Cuando dices, ‘voy a seguir sin importar lo que ocurra’, eso normalmente no es una buena señal. Yo estoy esperanzado en conseguir los delegados que necesito y estar en la convención con el número que se necesita para ser el nominado. Pero todo el mundo tiene derecho a permanecer (en la carrera) mientras quiera.
Sin dudas, Romney ha cambiado su estilo. Hoy, ganará convincentemente en la Florida, y lo logrará con el apoyo determinante de la élite del Partido Republicano, aunque Jeb Bush, figura clave de los republicanos en ese estado, prefirió guardar silencio. La batalla electoral, por lo tanto, es larga. Gingrich tendrá problemas en febrero, pues no hay debates durante este mes. Hay que buscar votos. Por otra parte, hay que ver la capacidad de resistencia de Rick Santorum y Ron Paul. Las próximas batallas serán en Nevada, luego Arizona y Minnesota.
————————-
Mientras, la portada de The New Yorker lo dice todo: Obama contempla riéndose la lucha descarnada entre Romney y Gingrich, como si fuese el ‘Super Bowl’.
Comentarios recientes